Seis paseos primaverales en las Rutas del Vino de España
En las 36 Rutas del Vino de España esparcidas por el territorio nacional se despliega un amplio abanico de atractivos naturales que invitan a ser recorridos y que son objeto de deseo cuando llega la primavera. En algunos se perciben aromas de jara o de romero mientras que en otros es la brisa marina la que despierta los sentidos. Todos estos itinerarios tienen algo especial. Os animamos a descubrirlos.
La naturaleza exhibe generosamente sus encantos durante los meses primaverales. A veces sorprende con prados moteados de flores, otras con aves sobrevolando desfiladeros o con el reflejo de las montañas en los lagos resplandecientes tras el deshielo. En todos los espacios aporta algo nuevo, fresco, y despierta nuestros sentidos. También en los territorios de las Rutas del Vino de España, claro. Seguid leyendo porque hemos seleccionado seis caminatas en otras tantas de esas Rutas, donde el entorno natural es el auténtico protagonista.
Ruta del Vino Alicante
Paseo ecológico de Benissa
Las rutas del vino con sabor a mar tienen algo especial, un algo que parece susurrar al oído mientras se recorren sus viñedos en primavera pero que impide alejarse en exceso del azul del Mediterráneo. Sin dejar de sentir la brisa es posible disfrutar tanto de los vinos alicantinos como de una naturaleza mimada por un clima indulgente. Una buena manera de dejarse llevar por la calma del lugar es que realicéis a vuestro ritmo el llamado Paseo ecológico de Benissa que empieza en Benissa y discurre durante 3,5 kilómetros entre calas y acantilados hasta llegar a Calpe. Ese camino, muy fácil de realizar, brinda un valioso aprendizaje sobre la flora y la fauna costera. Es aconsejable hacerlo con calma (no lleva más de una hora) para ir aprendiendo de los paneles divulgativos y, si el tiempo lo permite, darse algún que otro chapuzón en la playa de la Fustera, la cala dels Pinet, la cala de la Llobella o la bonita cala Baladrar. Las visitas a bodegas de Ruta del Vino de Alicante se pueden combinar fácilmente con los paseos costeros.
Paseo ecológico de Benissa. Lars ter Meulen
Ruta del Vino Ronda-Málaga
Ruta de los Molinos del Tajo, en Ronda
La Ruta del Vino de Ronda y Málaga agrupa nueve municipios con una naturaleza abrumadora. En esta ocasión nos centraremos en el entorno de Ronda, al ser uno de los principales reclamos turísticos. Esta monumental población no sólo concentra un rico patrimonio histórico sino que es un buen punto de partida para conocer esta ruta del vino e iniciar bonitos paseos senderistas. La ruta que os proponemos, Los molinos del Tajo, tiene una extensión de unos 4,5 kilómetros (solo ida) y comienza en el casco urbano de Ronda para bajar a continuación por la ‘cuesta del Cachondeo’ hasta la misma base del Tajo de Ronda. La primera sorpresa que aguarda este itinerario es la cascada del río Guadalevín, que se precipita justo a los pies del Puente Nuevo. La senda oficial de esta ruta, la
SL-38, regala un agradable paseo entre huertas y acequias, algunos molinos restaurados, el sonido alegre del río y el aroma de romero y tomillo. Buena compañía para una caminata alrededor de Ronda.
Tajo de Ronda
Ruta del Vino Arlanza
El desfiladero de La Yecla
De la Ruta del Vino de Arlanza os va a enamorar el contraste paisajístico de sus comarcas ya que invita a hacer una pausa para admirarlo en cada recodo del camino. Los campos de cereal de los valles del Cerrato ceden paso a los bosques de encinas, sabinas y robles que parecen perseguir a los arroyos en la comarca de Arlanza y los perfiles recios de la Sierra de la Demanda. Entre las numerosas caminatas que se pueden emprender en esta ruta del vino no os podéis perder la que discurre por el Desfiladero de La Yecla. Esta espectacular garganta por la que corre el arroyo de El Cauce (afluente del río Mataviejas) se encuentra en el Espacio Natural de la Yecla y los Sabinares de Arlanza, entre las poblaciones burgalesas de Santo Domingo de Silos y Caleruega. Os encantará la experiencia de recorrer los 600 metros de este desfiladero por las pasarelas habilitadas mientras se escucha el murmullo del río y las paredes se estrechan y ascienden –a veces más de cien metros– tratando de tapar la luz del sol. Si vais en primavera, cuando el caudal es mayor, el sendero resulta mucho más bonito.
Desfiladero de La Yecla. Juan Carlos Utiel
Ruta del Vino Calatayud
Parque Natural del Monasterio de Piedra
Aguas medicinales, patrimonio mudéjar, bodegas… la Ruta del Vino Catalayud concentra tantos atractivos para el amante del enoturismo que cualquier experiencia que os propongamos resultaría un acierto. Pero aún hay más, ya que si sois amantes de la naturaleza todo el entorno del Parque del Monasterio de Piedra os parecerá casi un sueño. Entre las sierras más escarpadas del Sistema Ibérico, en el municipio de Nuévalos (a 25 km de Calatayud), se oculta el reino del agua, una serie de bellísimos saltos de agua y cascadas, árboles centenarios, cuevas y arroyos alimentados por el río Piedra. Existe un itinerario de unos cinco kilómetros que permite admirar varios lagos (como el espectacular lago del Espejo), grutas, cataratas y zonas de descanso. Sin duda, uno de esos lugares donde no dejaréis de hacer fotos ni un solo instante.
Lago del Espejo en Monasterio de Piedra
Ruta del Vino La Manchuela
Sendero de Alcalá del Júcar
La Ruta del Vino La Manchuela, entre Cuenca y Albacete, lanza al visitante un mensaje de tesón y de tradiciones unidas al vino desde hace más de dos mil años. En esta comarca castellano-manchega se concentran tanto propuestas culturales -encabezadas por sus castillos, palacios y templos- como naturales en las que los cauces fluviales del Júcar y el Cabriel tienen un papel destacado. Como nuestro objetivo durante esta primavera es calzarnos las botas y adentrarnos por los lugares más sugerentes de las Rutas del Vino de España, hemos elegido el entorno de Alcalá del Júcar (Albacete) ya que es fácilmente combinable con cualquier experiencia enoturística. Desde esta bellísima población se pueden iniciar caminatas tan interesantes como la del Sendero el Morrón que discurre paralela al río Júcar hasta Tolosa. El itinerario circular requiere de cierta resistencia ya que se deben recorrer unos 15 kilómetros (unas 4 horas) pero el esfuerzo se ve compensado por los parajes que surgen tanto a pie de cauce como al ascender por las paredes de roca blanca. Las vistas del cañón desde arriba son inolvidables.
Alcalá del Júcar
Ruta del Vino Lleida
Los caminos del agua del Río Segre
La variedad patrimonial, paisajística, gastronómica y enoturística es la principal seña de identidad de la Ruta del Vino de Lleida. Su diversidad es una invitación a gozar a través de los sentidos, de forma simultánea, de sus muchos atractivos culturales. Es difícil describir la emoción que suscita la Seu Vella de Lleida, el monasterio de Vallbuena de los Monges o el castillo de Verdú, o no caer rendidos ante la belleza de parajes naturales como los del Montsec, el pantano de Utxesa o el robledal de Aulàs. Para esta primavera nos hemos quedado con dos itinerarios cortos a los que llaman los Caminos de agua del río Segre y que parten de la ciudad de Lleida. El primero lleva hasta el Parque periurbano de la Mitjana y el otro hasta la ermita de Butsènit. Ambos son paseos muy relajados entre bosques de ribera que conducen a las zonas húmedas más importantes de la comarca.
Cualquiera de estas caminatas (que no precisan de unas condiciones físicas extraordinarias) en espacios naturales de las Rutas del Vino de España os permitirán descubrir la belleza de estos territorios enoturísticos y complementarán vuestras visitas propiamente vitivinícolas.
Parque de la Mitjana. Turisme de Lleida
Pepa García, periodista especializada en viajes.
Lleva más de dos décadas trabajando en prensa turística, cultural y gastronómica. Amante del turismo y la buena mesa, disfruta de la vida sencilla y el contacto con la naturaleza. Siempre la encontraréis cerca del mar.
#elenoturismoestademoda