La Asociación Española de Ciudades del Vino (ACEVIN) continúa sumando nuevos socios. El último en hacerlo ha sido la Fundació Mallorca Turisme, del Consell de Mallorca, una entidad pública integrada en el órgano de gobierno autonómico de la isla de Mallorca, incorporado a la Asociación tras la reciente Junta Directiva celebrada por la misma.
La Fundació Mallorca Turisme es la encargada de fomentar la promoción turística de la isla en los mercados nacionales e internacionales, así como la creación de producto turístico, la gestión de servicios turísticos en general, y toda actividad que tenga por objetivo promover el turismo en la isla.
Esta nueva adhesión supone la primera integración de una localidad o un organismo balear en este grupo de ciudades y territorios que tienen como denominador común la relevancia de la industria vitivinícola en su economía, un factor que, según entienden los municipios que integran ACEVIN, determinan aspectos que van desde el perfil urbanístico y paisajístico hasta la estructuración del mercado laboral e incluso la cultura de la comunidad, otorgándole una identidad propia.
Desde ACEVIN se llevan a cabo proyectos en ámbitos como la potenciación de la agroindustria, el patrimonio industrial, la creación de instrumentos de promoción local y de diversificación de la actividad económica o la cultura y el turismo vitivinícola. Precisamente dentro de este último ámbito se integra el Club de Producto Rutas del Vino de España, una creación pionera de la Asociación Española de Ciudades del Vino basada en un modelo de cooperación público-privada y en un cuidadoso sistema de calidad.
El Bierzo y Jerez renuevan certificación
La última Junta Directiva de ACEVIN ha servido, igualmente, para aprobar la renovación de dos de las Rutas del Vino que forman parte de ese club de producto, las Rutas del Vino de España: la Ruta del Vino Bierzo Enoturismo y la Ruta del Vino y el Brandy del Marco de Jerez.
Cada una de las 31 rutas que actualmente integran esta marca debe pasar auditorias de calidad de manera periódica que aseguren que los estándares exigidos sean mantenidos en todos los establecimientos y servicios (alojamientos, restaurantes, bodegas, enotecas, agencias de viajes, empresas de actividades de ocio, etc.). La certificación garantiza esa calidad por la que, entre otros motivos, Rutas del Vino de España se ha convertido en la marca referente del enoturismo en nuestro país y en uno de los clubes de producto mejor valorados desde las instituciones turísticas estatales.
Estas dos Rutas son un ejemplo de la variedad de territorios diferentes y complementarios que forman parte de las Rutas del Vino de España. La Ruta del Vino Bierzo Enoturismo, en el norte peninsular, en la provincia de León, da cuenta de una cultura vitivinícola tradicional arraigada desde hace siglos en un territorio marcado, entre otros aspectos, por una de las rutas de peregrinaje más antiguas, el Camino de Santiago. Por su parte, la Ruta del Vino y el Brandy del Marco de Jerez, en el sur, en la provincia de Cádiz, recoge una tradición enológica única y milenaria, con vinos y formas de criarlos y elaborarlos igualmente singulares y excepcionales.